El andador
Una consulta habitual cuando los bebés comienzan a estar más tiempo despiertos en el dia es: “Dra, cuando lo puedo poner en el andador?” y la única respuesta sensata es: Nunca!
Los andadores se utilizan desde el siglo XVII, pero desde hace un par de décadas se comenzaron a desaconsejar al evaluarse la gran cantidad de accidentes que provocan.
En Canadá está prohibida su venta, publicidad y utilización desde 2004. Y no solo eso, sino que si un niño debe recibir atención médica por lesiones por el uso de andador, los padres son multados.
La Academia Americana de Pediatria, la Sociedad Argentina de Pediatria y otras tantas asociaciones científicas desaconsejan su uso, ya que hay estudio de sobra que demuestran que su uso es peligroso. Veamos algunos números:
Alrededor de un 70% de los bebés usa andador.
La edad promedio de inicio del uso ronda los 7 meses.
El 40% de los bebés sufre algún accidente, de diversa gravedad.
Los accidentes más frecuentes suelen ser vuelcos y caídas por escaleras.
El 5% de los accidentados requiere internación.
Los niños que utilizan el andador no tienen ninguna ventaja. El andador no enseña a caminar, ya que imposibilita que la cadera se estabilice, impide sostener el peso del cuerpo en las plantas de los pies, no ayuda en la obtención del equilibrio y favorece la marcha en puntas de pie.
Los riesgos que provoca el uso de andador son muchos, por nombrar otros:
-Traumatismo de Craneo por vuelcos y caídas por escaleras.
-Intoxicaciones e ingesta de cuerpos extraños: los niños, al adquirir movilidad, acceden a sustancias como medicamentos, artículos de limpieza, objetos pequeños. Ellos conocen el mundo por medio de su boca, por lo que todo lo que puedan agarrar será llevado a la misma.
-Electrocución: llegan a cables y enchufes.
-Quemaduras: acceden a la cocina, lugar muy peligroso para un bebé, donde se pueden quemar con el horno. Tambien llegan a manteles, que tironean y arrastran, con lo que pueda haber en la mesa (tazas de té, pavas, etc). También llegan a calefactores en toda la casa.
-Ahogamiento: en casas o lugares con piscinas, en baños.
Y muchos otros: mordeduras de perro, ahorcamiento, lesiones cortantes…
Y entonces…. Donde ponemos al bebé?
-En el piso: siempre con supervisión, sobre una manta o alfombra limpias. El gateo es una actividad mucho más segura que el andador, ya que el niño necesita las manos apoyadas en el piso para lograr estabilidad. Esto impide que pueda acceder a muchas cosas peligrosas. El gateo es una actividad motriz excelente para el bebé. Le enseña a equilibrarse, a manejar el peso corporal y lo prepara para la etapa de caminador. Hay estudios que indican que mejora la curvatura normal de la columna cervical.
Es importante recalcar que en ninguna circunstancia se debe dejar a un bebé sin supervisión. Son muchos más rápidos y hábiles de lo que parecen.
En definitva... Nunca es seguro usar el andador!
Fuente:
TRIVIÑO, X et cols. Uso de andador en lactantes. Rev chil pediatr.68 (6); 256-259, 1997
K. RHODES, D. KENDRICK, J. COLLIER: Andadores para Bebés. Arch Dis Child 2003;88:1084-1085
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